Recorrer La Cumbre significa perderse en la verde serenidad del valle y la montaña. El golf fue el deporte que le dio a conocer, al que se sumarían con el tiempo actividades como el aladeltismo, parapente, mountain bike y montañismo. No menos importantes son las cabalgatas, algunas a la luz de la luna, o el solaz de las caminatas por quebradas y las faldas de la montaña, en compañía de una privilegiada fauna y flora.
Una importante infraestructura hotelera y un circuito gastronómico para los paladares más exigentes, esperan a sus visitantes todo el año y para aquellos que buscan la tranquilidad, existe un recorrido artístico-cultural que nos muestra la obra de más de 30 artistas que eligieron desarrollar su vida en esta localidad.
Con aromas de lavanda, el silbido de la calandria o con velas surcando el cielo, en La Cumbre se comparte el espíritu de aventura o la placidez del infaltable “té a las cinco”. No podía ser de otra manera en un lugar imperdurable, casi al estilo inglés.
El Golf Club se encuentra a 1 km de la zona céntrica y es considerado uno de los más bellos de nuestro país. Son 18 hoyos y par 70 con una longitud de 5463 m para caballeros y 4810 para damas.
Una importante infraestructura hotelera y un circuito gastronómico para los paladares más exigentes, esperan a sus visitantes todo el año y para aquellos que buscan la tranquilidad, existe un recorrido artístico-cultural que nos muestra la obra de más de 30 artistas que eligieron desarrollar su vida en esta localidad.
Con aromas de lavanda, el silbido de la calandria o con velas surcando el cielo, en La Cumbre se comparte el espíritu de aventura o la placidez del infaltable “té a las cinco”. No podía ser de otra manera en un lugar imperdurable, casi al estilo inglés.
El Golf Club se encuentra a 1 km de la zona céntrica y es considerado uno de los más bellos de nuestro país. Son 18 hoyos y par 70 con una longitud de 5463 m para caballeros y 4810 para damas.