La Cumbre es un pequeño paraíso emplazado en el corazón del valle de Punilla, a sólo 94 kilómetros de la ciudad de Córdoba. El pueblo, que no se diferencia mucho de otros pueblos criollos, esconde unos alrededores preciosos, con un fuerte sabor inglés.
En la década del veinte familias inglesas acomodadas descubrieron este rincón de las Sierras de Córdoba y construyeron grandes casonas rodeadas de fabulosos jardines. Atrás de ellos llegaron porteños ilustres –presidentes, escritores, familias de mucha fortuna- y levantaron increíbles casas donde pasaban las largas temporadas de verano.
De la época de oro de La Cumbre quedan un golf espectacular y varias casonas que hoy funcionan como hoteles con encanto, casi todas enclavadas en el barrio de Cruz Chica. El pueblo, ideal para tomarlo como base para recorrer las sierras, tiene un sabor inigualable, mezcla de tradiciones criollas centenarias y un aire inglés que permanece sin querer irse.
En la década del veinte familias inglesas acomodadas descubrieron este rincón de las Sierras de Córdoba y construyeron grandes casonas rodeadas de fabulosos jardines. Atrás de ellos llegaron porteños ilustres –presidentes, escritores, familias de mucha fortuna- y levantaron increíbles casas donde pasaban las largas temporadas de verano.
De la época de oro de La Cumbre quedan un golf espectacular y varias casonas que hoy funcionan como hoteles con encanto, casi todas enclavadas en el barrio de Cruz Chica. El pueblo, ideal para tomarlo como base para recorrer las sierras, tiene un sabor inigualable, mezcla de tradiciones criollas centenarias y un aire inglés que permanece sin querer irse.
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